La Psicología Educativa es la rama de la Psicología que se encarga de estudiar el aprendizaje y el desarrollo humano en el ámbito de la educación.
En UNIR México analizamos en qué consiste la Psicología Educativa y sus competencias, que van más allá del ámbito escolar.
¿Qué es la psicología educativa?
la Psicología Educativa; es la rama de la Psicología que se encarga de estudiar el aprendizaje y el desarrollo humano en el ámbito de la educación. Sus investigaciones, siempre bajo un marco científico, buscan optimizar los aprendizajes y el rendimiento de los alumnos. Estos estudios se traducen en nuevos planteamientos sobre las estrategias educativas eficaces y los programas de intervención más novedosos.
De esta definición podemos extraer el segundo foco de atención de la Psicología Educativa: la instrucción del profesorado. Es decir, las investigaciones psicoeducativas están ligadas a la innovación, ya que permiten aplicar nuevos modelos y técnicas de enseñanza en las aulas.
Objetivos de la Psicología Educativa
El objetivo principal de la psicología educativa es comprender y mejorar el proceso de enseñanza-aprendizaje, considerando tanto los factores psicológicos como los contextos sociales y educativos que influyen en él. Busca aplicar principios de la psicología para optimizar el desarrollo intelectual, emocional y social de los estudiantes, así como para apoyar a los docentes en su labor pedagógica. En resumen, su propósito es favorecer el aprendizaje significativo y el desarrollo integral del estudiante, mediante la aplicación de conocimientos psicológicos al contexto educativo.
Además de su objetivo principal, la psicología de la educación también se enfoca en:
Analizar los procesos de aprendizaje para comprender cómo aprenden los estudiantes en diferentes etapas del desarrollo.
Diseñar estrategias pedagógicas efectivas que se adapten a las necesidades individuales y colectivas del alumnado.
Identificar y atender dificultades de aprendizaje y problemas de conducta en el contexto escolar.
Promover el desarrollo emocional y social de los estudiantes dentro del ambiente educativo.
Apoyar a los docentes en la mejora de sus prácticas pedagógicas y en la gestión del aula.
¿Dónde se aplica la psicología educativa?
La aplicación de la psicología educativa busca mejorar el rendimiento académico, la motivación, el desarrollo emocional y social, y la inclusión educativa. Esta disciplina es clave tanto para los docentes como para los estudiantes, ya que aporta herramientas para comprender cómo se aprende y cómo se enseña de manera más eficaz.
Ámbitos de aplicación:
Escuelas y centros educativos: Apoya a docentes y orientadores en la identificación de necesidades educativas especiales, estrategias de enseñanza, y en el manejo de la conducta estudiantil.
Departamentos de orientación escolar: Brinda acompañamiento psicológico a estudiantes, evalúa dificultades de aprendizaje y propone planes de intervención.
Universidades: Se aplica en la formación docente, asesoramiento a estudiantes y desarrollo de programas de apoyo académico.
Educación especial: Ayuda en la creación de estrategias inclusivas para estudiantes con discapacidades o trastornos del aprendizaje.
Investigación educativa: Contribuye al estudio y mejora de teorías y prácticas pedagógicas.
Diseño de materiales educativos: Participa en la creación de contenidos adaptados a diferentes estilos de aprendizaje.
Capacitación docente: Ofrece formación continua a profesores para mejorar su práctica pedagógica desde una perspectiva psicológica.
Ejemplos de Aplicación de la Psicología Educativa
La psicología educativa se manifiesta en muchas acciones cotidianas dentro del ámbito escolar. Estos ejemplos ilustran cómo sus principios se traducen en prácticas concretas que benefician tanto a estudiantes como a docentes:
Adaptación curricular para estudiantes con dificultades de aprendizaje: Un psicólogo educativo colabora con docentes para modificar los contenidos o estrategias de enseñanza, facilitando la comprensión y participación del alumno.
Aplicación de pruebas psicopedagógicas: Se evalúa a un estudiante que presenta bajo rendimiento para identificar si existe algún trastorno del aprendizaje como dislexia o TDAH, y así intervenir adecuadamente.
Capacitación docente en manejo de aula: Se organizan talleres donde los maestros aprenden técnicas de disciplina positiva, motivación y resolución de conflictos.
Promoción del desarrollo socioemocional: Se implementan programas que trabajan habilidades como la empatía, la autorregulación y el trabajo en equipo dentro del aula.
Diseño de ambientes de aprendizaje motivadores: Basado en teorías psicológicas, se crean espacios que estimulan la curiosidad, el pensamiento crítico y la autonomía del estudiante.
Desarrollo humano y educación: dos ramas entrelazadas
Imaginemos el caso de un niño de 4 años que muestra dificultades en el desarrollo de su capacidad comunicativa, sin evidencia médica de que sufra ningún tipo de discapacidad auditiva. Antes de elaborar un programa de intervención, se debería analizar cómo evoluciona el lenguaje a lo largo de la infancia, pero también en qué fase de este proceso se encuentra el niño y si los problemas en el habla son síntoma de algún otro tipo de trastorno.
Este caso ficticio nos ayuda a entender la estrecha relación que existe entre la Psicología Educativa y la Psicología Evolutiva y del Desarrollo, la cual está enfocada en el estudio e investigación de los cambios psicológicos a lo largo del ciclo vital de un humano. En otras palabras: su objetivo es establecer las teorías explicativas sobre el desarrollo de las capacidades —inteligencia y lenguaje, entre otras— durante la infancia, adolescencia y vida adulta.
También la Psicología del Desarrollo, al igual que la Psicología Educativa, contempla las variables externas que intervienen en ese proceso de maduración cognitiva: edad, herencia genética, factores socioculturales… Otra característica que comparten es el reconocimiento de factores internos que, sin lugar a duda, impulsan el desarrollo integral del humano: las emociones, las actitudes, los valores sociales o la metacognición.
El estudio sobre la influencia de estos factores en el aprendizaje ha generado diversas teorías explicativas a lo largo de la historia, hasta llegar al modelo constructivista: el paradigma donde se asientan las bases de la escuela actual.
El modelo constructivista en la psicología educativa
El constructivismo supone un cambio radical en el concepto tradicional de los roles del profesor y alumno, puesto que defiende el papel activo de este último en el proceso de aprendizaje. Además, permite mostrar al docente los materiales de construcción y las directrices necesarias para que el niño progrese en su propio desarrollo integral.
Una de las teorías que ayuda a comprender el modelo constructivista es el andamiaje. Esta está basada en los principios del desarrollo y aprendizaje psicosocial del psicólogo ruso Lev Vygotsky, considerado uno de los grandes propulsores de la Psicología de la Educación.
A grandes rasgos, la teoría del andamiaje perfila al maestro como un instructor que presenta al alumno la información necesaria —y estructurada— para que resuelva un problema o tarea que le ayudará a desarrollar una serie de aprendizajes. Esta tarea debe suponer un reto motivador para el niño, pero tiene que estar ajustada a los conocimientos previos del alumno. Mientras el niño la va resolviendo, el profesor debe limitarse a ofrecer los apoyos necesarios para que alcance el objetivo.
Importancia de la psicología educativa
La psicología educativa es fundamental para el desarrollo de procesos de enseñanza y aprendizaje más eficaces, humanos e inclusivos. Su importancia radica en que permite comprender cómo aprenden las personas, qué factores influyen en su rendimiento académico y cómo se puede intervenir de manera positiva ante dificultades emocionales, sociales o cognitivas. Gracias a esta disciplina, los docentes pueden aplicar estrategias adaptadas a las características individuales de sus estudiantes, promoviendo así un aprendizaje más significativo, equitativo y centrado en el bienestar integral del alumno.
Formación en Psicología de la Educación: competencias profesionales
La función principal del psicólogo educativo es mejorar el sistema de enseñanza trabajando en tres niveles: en el desarrollo de las capacidades de un individuo, de grupos o de las instituciones. Esto supone la adquisición de competencias en:
- Técnicas de evaluación e intervención psicoeducativa
- Diseño de programas de adaptación curricular y proyectos educativos
- Habilidades para el asesoramiento y orientación vocacional y profesional
Titulaciones como la Maestría en Aprendizaje, Cognición y Desarrollo Educativo o la Maestría en Psicopedagogía te ayudarán a entender las claves para identificar y dar solución a los problemas de aprendizaje de los alumnos y optimizar su rendimiento.
