Combinar el trabajo en equipo con el liderazgo contribuye a que las empresas crezcan gracias a la mejora de la productividad y un mayor compromiso de los trabajadores.
Para el correcto funcionamiento de una compañía es esencial que las tareas sean delegadas entre los distintos equipos de trabajadores, que deben cumplirlas adecuadamente. Combinar liderazgo y trabajo en equipo puede ayudar a una empresa a alcanzar el éxito, sin importar su tamaño o el sector en el que se desempeñe.
Aprender a liderar una empresa con éxito es posible, particularmente si se cuenta con una formación como la que ofrece el Executive MBA Online (EMBA) de UNIR México.
El liderazgo es el conjunto de habilidades directivas que posee una persona, las cuales le ayudan a influir en el comportamiento de otros individuos para animarlos a alcanzar ciertas metas u objetivos. El cómo coordinar un equipo de trabajo no es una tarea sencilla, pero será más fácil con esta característica.
Por su parte, el trabajo en equipo puede definirse como la labor que llevan a cabo un conjunto de personas para conseguir una meta común. En esta forma de colaboración, cada integrante debe participar de forma activa, subordinando sus intereses individuales en beneficio de los del grupo.
La importancia del liderazgo y el trabajo en equipo
Las empresas mexicanas son conscientes de la importancia del liderazgo y trabajo en equipo, ya que la combinación de ambos ayuda a incrementar los niveles de productividad y mejorar las tasas de eficiencia.
Otras ventajas son:
- Disminución del estrés: al crearse ambientes de trabajo más agradables, existe menos presión.
- Reducción de los errores: al trabajar en equipo, hay menos probabilidades de que se comentan fallos graves.
- Mejor comunicación: se fomenta la comunicación abierta y transparente entre las personas.
- Empleados más motivados: gracias al respaldo y la orientación de una cabeza visible, los integrantes del equipo tienen más ganas de contribuir al bienestar de las empresas.
- Fortalecimiento de la confianza: el buen liderazgo consiste en escuchar a los colaboradores y tener en cuenta sus opiniones. Esto, a su vez, genera entre los empleados una mayor confianza en su líder y en la empresa para la que trabajan.
- Ambiente de trabajo más agradable: la combinación de liderazgo con trabajo en equipo hace que las tareas sean más amenas y los empleados realicen su labor de forma más eficiente y comprometida.
- Mejora del sentido de la pertenencia: los logros compartidos sirven para elevar la satisfacción personal y hacen que los integrantes de un equipo sientan que pertenecen al grupo.
Por todo ello, liderazgo y trabajo en equipo son dos de las habilidades blandas (soft skills) más apreciadas por las empresas. Además, el primero es esencial para que el segundo funcione correctamente.
¿Cuáles son los objetivos del liderazgo y trabajo en equipo?
Los objetivos de liderazgo y trabajo en equipo son varios. Destacan:
- Elevar la productividad. Es uno de los principales objetivos de esta forma de organizar el trabajo, gracias al reparto de tareas y la labor que realiza el líder para fortalecer el desempeño de todos los colaboradores.
- Impulsar la creatividad. Al poder expresar los distintos puntos de vista de una manera guiada, se fomenta la creatividad y la innovación.
- Solucionar los problemas. Las personas del equipo pueden aportar su punto de vista y su trabajo para ayudar a resolver cualquier problema.
- Alcanzar las metas establecidas. Es esencial que el líder dirija al equipo y lo motive adecuadamente, de esta manera todas las personas estarán enfocadas en lograr los objetivos marcados.
- Generar un ambiente de confianza. Es fundamental para que todas las personas trabajen de forma óptima, asuman sus responsabilidades y colaboren activamente en la consecución de las metas.
El rol del líder en un equipo de trabajo
El rol de un líder en un equipo de trabajo es guiar a las personas para conseguir un objetivo concreto. Además, es responsable de crear un entorno de trabajo colaborativo y determinar qué dirección se seguirá dentro de un proyecto.
Sus responsabilidades incluyen:
- Organizar el trabajo.
- Informar sobre cuáles son las metas que se buscan alcanzar.
- Delegar tareas.
- Prever las necesidades que se tendrán.
- Asignar los recursos.
- Resolver problemas.
- Informar del progreso del proyecto.
- Motivar a los integrantes del equipo durante todo el proceso.
- Defender los intereses y solucionar las necesidades del grupo.
- Comunicar los objetivos.
- Establecer el método de trabajo.
- Fomentar la participación.
- Analizar los errores y aprender de los mismos.
- Propiciar un buen clima de trabajo.
Ejemplos de liderazgo y trabajo en equipo
A continuación se analizan algunos ejemplos de liderazgo y trabajo en equipo:
- Apple. Cuando Steve Jobs lideraba la empresa, dirigía un equipo de cinco personas con una técnica de trabajo e inclusión en equipo. La colaboración consistía en el pilar de la organización, en la que cada miembro tenía una vocación diferente. Además, se brindaba la confianza a los trabajadores para que estos tuvieran la capacidad de resolver problemas sin la necesidad de una supervisión constante.
- Procter & Gamble. Esta es una compañía que ofrece bienes de gran consumo en dos rubros: belleza y cuidado personal y cuidado del hogar. Para lograr operar en 70 países y alcanzar las metas establecidas, el trabajo en equipo es parte de su cultura empresarial.
Asimismo, busca imprimir el liderazgo dentro de los miembros de la empresa para que los trabajadores tengan una mayor implicación y realicen sus tareas con determinación. La compañía se caracteriza por entrenar a líderes empresariales por medio del coaching empresarial.
Como se puede ver, el buen liderazgo y trabajo en equipo resultan claves para el desarrollo exitoso de una empresa o proyecto. Existen distintos estilos de liderazgo para nuevos líderes, pero sin importar cuál se emplee, al optimizar las capacidades de cada uno de los individuos que conforman un grupo, es más fácil alcanzar las metas establecidas.