Content Manager: ¿en qué consiste este perfil y cuáles son sus funciones?

La frase de “si no estás en internet, no existes”, quizás habría que cambiarla por “si no estás en internet con un contenido original, no existes” o, al menos, pasarás desapercibido y no conectarás con tu público objetivo (ni con nadie). O, como se conoce en el mundo del marketing digital, Content is King. En la era de la hiperconexión es imprescindible contar con una estrategia de comunicación propia que sepa crear un relato, historias que emocionen que vayan más allá de vender un producto o un servicio. ¿Cómo conseguirlo? Incorporando a nuestra empresa u organización un buen Content Manager.

¿Qué es el content manager en una empresa?

El Content Manager es un perfil básico en la estrategia de comunicación de una entidad con presencia online. Sus funciones van desde el diseño de un plan de comunicación hasta la generación de diferentes formatos de contenido para los diversos canales digitales (páginas web, redes sociales, newsletter, blog…). Se trata de un perfil multidisciplinar que requiere de una formación específica, capacidad de adaptarse a las necesidades de clientes dispares y, sobre todo, creatividad para lograr un contenido original.

¿Cuáles son las funciones del Content Manager?

De él depende la creación y coordinación de contenido en diferentes formatos para diversas plataformas para lograr un buen posicionamiento, crear marca y, como consecuencia, cumplir los objetivos de la empresa u organización, que pueden ser desde la venta de unos zapatos veganos hasta la captación de alumnos para se matriculen en un curso de francés. Entre las funciones del Content Manager estarían:

• Diseñar y planificar una estrategia global de contenidos: fundamental que se tenga en cuenta el briefing de cada empresa.
• Coordinación de equipos: tanto de los que se ocupen específicamente de la redacción de contenidos como de estos con otras áreas de la agencia, como el de SEO o Visual.
• Planes de contenido: un documento en el que constarán las diferentes publicaciones/contenido en función de los canales, buyer persona o keywords. Lo recomendable es que sea con formato calendario para llevar un control de todas las acciones previstas.
• Storytelling: construir historias originales que emocionen y se diferencien frente a la competencia. ¿Historias? Sí, porque ¿qué hay mejor para engancharse a una marca que un buen relato de esos que te dejan con ganas de más? Para ello habrá que adaptarlas a las particularidades de los diferentes formatos y canales (no es lo mismo un post para la web de un supermercado, que un story en el Instagram de un grupo de música clásica). No solo hay que ser creativos, sino también coherentes (con la marca y lo que transmitimos en los diferentes canales).

• Redacción de contenido: teniendo en cuenta los criterios SEO y los buyer persona de cada cliente. Siempre tendrá que ser original y aportar valor.
• E-mail marketing: redacción y envío de newsletters, emails de encuestas de satisfacción, promociones…
• CMS: subida de contenido a diferentes CMS, como WordPress, jugando con sus diversas posibilidades. ¿Sabías que un gran número de webs funcionan con WordPress?
• Revisión: supervisar todo el contenido para que sea de calidad, original, sin faltas de ortografía, centrado en los objetivos… Además, el Content Manager también se encarga de revisar las infografías, fotografías, vídeos… Porque, sí, lo visual también es contenido.
• Gestión de redes sociales: además de la redacción de contenido adaptado a cada plataforma, es fundamental conocer las particularidades de cada red social. Si vamos a publicar en LinkedIn, por ejemplo, mucho mejor hacerlo en un día laborable que en un festivo (el lunes sería el día más indicado). A ello hay que sumarle la interacción y escucha activa de los usuarios.
• Social Ads: saber crear y gestionar anuncios para redes sociales como Instagram o Facebook.
• Medir resultados: para comprobar si se están cumpliendo los objetivos o qué medidas es necesario implementar. En la medida de lo posible hay que monitorizar todos los canales para tener una “foto” real de los resultados.

¿Qué estudiar para ser content Manager?

Planificar, gestionar o redactar contenido requiere de una formación adecuada para conocer las diferentes herramientas y estrategias con las que construir el relato/imagen de una marca, empresa u organización. No solo se trata de escribir bien y de hacerlo de forma creativa, sino también de saber elaborar una estrategia de Content Marketing, conocer los multicanales por los que transmitir nuestro mensaje, cómo funciona cada uno de ellos, la importancia del SEO, la Analítica Digital…

Para convertirte en Content Manager en una departamento de Comunicación y/o Marketing, es recomendable tener una o varias formaciones universitarias como:

• Licenciatura en Mercadotecnia
• Licenciatura en Comunicación
• Maestría en Comunicación e Identidad Corporativa
• Maestría en Marketing Digital y Comercio Electrónico
• Maestría en Neuromarketing

Cualidades y habilidades de un Content Manager

Además de una buena formación, un Content Manager debe contar con una serie de aptitudes para desempeñar su trabajo de la forma más eficiente posible.

• Adaptación: internet es un ente “vivo” en el sentido de que cambia continuamente. Por eso es fundamental saber adaptarse a sus cambios algo que, por ejemplo, es muy palpable en el caso de las redes sociales. Esta capacidad de adaptación también hay que aplicarla en el día a día para ser capaz de atender a necesidades de clientes dispares.
• Escucha: tanto del cliente como de su target y, por supuesto, la competencia.
• Diálogo: para entender las necesidades, objetivos y particularidades de la empresa y organización. Hay que tener en cuenta que las funciones del contenido digital son diversas, desde la venta de un producto concreto hasta la fidelización de clientes pasando por el engagement de una publicación en Instagram.
• Creatividad: el pilar de cualquier Content Manager. Cada post de un blog, cada contenido de una newsletter o cada sección de una web debe ser siempre original y estar bien escrito independientemente de su extensión o cometido.

El Content Manager es una profesión del presente con mucho futuro. En un maremágnum como internet es fundamental contar con un contenido de calidad y diferenciado y, para ello, hay que contar con el profesional adecuado.