La escucha activa forma parte de las habilidades blandas tan valoradas por las empresas. Aquí podrás conocer qué es, así como sus características para ponerlo en práctica en tu trabajo.
Escuchar lo es todo. Nos ofrece información, nos permite interpretarla y tomar decisiones en torno a ello. Por esta razón, la escucha activa es una de las habilidades más importantes que debemos tener hoy en día. Sin embargo, aunque sabemos de la importancia de escuchar, no siempre lo hacemos y es porque se necesita paciencia, tiempo y predisposición para saber como escuchar.
En este artículo, aprenderás qué es y para qué sirve la escucha activa, sus tipos y las ventajas de aplicarla en el trabajo y en la vida en general. Y, con todo, entenderás que no es lo mismo oír que escuchar. ¡Sigue leyendo!
Qué es escucha activa
La escucha activa significa escuchar activamente y con plena conciencia e interés en lo que la persona o personas que tenemos delante nos está transmitiendo. Por tanto, la escucha activa implica nuestro interés por la conversación y por lo el mensaje que nos están trasladando.
Del mismo modo, escuchar activamente conlleva al interés y predisposición en comprender el mensaje de manera correcta de acuerdo a lo que nos quieren transmitir. Todo ello implica una plena atención en la persona y en el mensaje. En definitiva, no se trata de oír sino de escuchar donde se ponen a trabajar nuestras capacidades cognitivas y de empatía que tengamos.
Los mensajes no son solo palabras, también incluyen gestos, sentimientos, formas de transmitirlo y expresión, entre otras cosas. Tenerlo todo en cuenta significa estar escuchando de manera activa. Para saber si estamos escuchando de manera activa, existen ciertas señales o características que lo hacen evidente.
Características de la escucha activa en el trabajo
La escucha activa en el trabajo y en otros ámbitos de la vida se caracteriza por distintas evidencias que detallamos a continuación. Estas, como comentábamos anteriormente, pueden ser de carácter verbal o no.
- Empatía: la empatía es la primera de todas las características cuando escuchamos activamente. Ello significa que tenemos el interés y la actitud correcta para escuchar a quien nos habla.
- Atención al lenguaje corporal: prestar atención al lenguaje no verbal es otra de las características de la escucha activa. Este lenguaje ofrece mucha información sobre los sentimientos del interlocutor, por ejemplo.
- Mantener el contacto visual: más que importante es mirar a quien nos está enviando el mensaje. Es símbolo de estar prestando atención y mostrando interés. Mirar a los ojos también forma parte de esta característica.
- Lenguaje corporal: también muy relevante que denotará el interés que tenemos en la conversación. Escuchar activamente implica que nos inclinemos ligeramente hacia delante o hacia los lados cuando estamos sentados.
- Validación del mensaje o palabras de refuerzo: validar el mensaje emitiendo palabras de refuerzo mientras nos hablan es también un síntoma de que estamos escuchando de manera correcta. Sin embargo, esto no debe ser un exceso, sino aplicado en su justa medida para no provocar el efecto contrario.
- No juzgar: es una de las primeras normas de la escucha activa. Si lo hacemos, no servirá de nada el resto de habilidades dentro de la escucha activa. Será necesario que nos despojemos de los prejuicios.
- Hacer un resumen: resumir todas los expuesto y hablado hará que dejemos claro que todo ha sido entendido y escuchado de forma correcta.
- Feedback: como parte última de la escucha activa, tenemos la respuesta y feedback que vamos a ofrecer.
Ventajas y desventajas de la escucha activa en el trabajo
Existen numerosas ventajas de la escucha activa en el trabajo y, en general, en todos los contextos de la vida. Pasamos a detallar cuáles son los beneficios de la escucha activa:
- Favorece un ambiente positivo en los equipos de trabajo.
- Genera confianza y mejora la autoestima.
- Minimiza los malentendidos
- Mejora la toma de decisiones
- Contribuye a la resolución de conflictos
- Permite anticiparse a los posibles conflictos
- Incrementa la motivación
- Evita prejuicios
- Fortalece el conocimiento entre compañeros de trabajo
- Mejora la relación jefe-empleado
- Se promueven las relaciones interpersonales
- Aumenta el nivel de empatía
Aunque la cantidad de ventajas es muy superior a los inconvenientes que esta presenta, también es importante conocer las desventajas de la escucha activa:
- Puede ser agotadora si se practica constantemente, ya que requiere un esfuerzo mental continuo.
- La toma de decisiones puede llevar más tiempo, puesto que implica escuchar antes de responder.
- Puede generar malentendidos si la interpretación del mensaje del hablante no es precisa.
- Puede ser difícil mantener el enfoque y la concentración en situaciones de ruido o distracciones.
Tipos de escucha vs escucha activa
Hay diferentes tipos de escucha, pero queremos destacar la escucha activa en el trabajo. Es importante tener empatía al escuchar, y esto lleva a otras características esenciales.
- Apreciativa: cuando escuchamos sin prestar atención, buscando solo placer. Escuchamos por entretenimiento, pero no prestamos atención.
- Selectiva: se escucha seleccionando solo la información que interesa. Solo escuchamos algunos puntos del mensaje, sin escucharlo todo.
- Discernitiva: cuando se extraen las ideas principales del mensaje, atendiendo al fondo únicamente y no la forma.
- Analítica: cuando estudiamos las relaciones entre las ideas del mensaje. Escuchamos el orden y el sentido de la información para entender la relación entre las ideas, reflexionando sobre el mensaje.
- Sintetizada: se toma la iniciativa en la comunicación, atendiendo a nuestros objetivos. Se trata de dirigir la conversación a nuestro interés. 5
- Empática: interpretamos el mensaje poniéndonos en el lugar del emisor.
- Activa: Requiere esfuerzo físico y mental para entender completamente el mensaje, interpretando el tono de voz y el lenguaje corporal en la comunicación verbal. Significa escuchar con atención, entender el mensaje y demostrarle a nuestro interlocutor que se siente bien interpretado.
Ya sabes qué es la escucha activa y cómo aplicarla en el trabajo. Ponlo en práctica y verás los excelentes resultados para ti y tus compañeros. Conoce las habilidades blandas, o también denominadas soft skills, que más demandan las empresas. En UNIR México, somos conscientes de su importancia y todas nuestras Maestrías en línea incluyen sin costo adicional, un Diplomado en Soft Skills para desarrollar las habilidades gerenciales más demandadas.
¿Por qué es importante la escucha activa?
La escucha activa es fundamental en la comunicación interpersonal y profesional por varias razones. En primer lugar, permite una comprensión más profunda de los mensajes que se reciben, lo que facilita la toma de decisiones informadas y la resolución de problemas efectiva. Además, fomenta la empatía y el establecimiento de relaciones sólidas, ya que demuestra interés genuino en lo que el interlocutor tiene que decir.
La escucha activa también reduce los malentendidos y conflictos, al tiempo que promueve la colaboración y el trabajo en equipo. En resumen, es una habilidad esencial para mejorar la comunicación, construir relaciones sólidas y lograr un éxito tanto personal como profesional.
Ejemplos de escucha activa en el trabajo:
Los ejemplos que nombramos a continuación ilustran a la perfección cómo la escucha activa en el ámbito laboral puede mejorar la comunicación, fomentar la resolución de problemas y fortalecer las relaciones entre los miembros del equipo.
- Reuniones de equipo efectivas: Durante una reunión de equipo, un líder que practica la escucha activa se enfoca en escuchar atentamente las ideas y preocupaciones de los miembros del equipo. En lugar de interrumpir o imponer sus propias opiniones, permite que los demás expresen sus puntos de vista. Hace preguntas para aclarar y profundizar en las ideas de los demás. Al practicar la escucha activa, el líder demuestra respeto por las contribuciones de todos, fomenta la participación y ayuda a construir un ambiente de trabajo donde se valoran las opiniones de cada miembro.
- Resolución de conflictos: Cuando surgen conflictos en el lugar de trabajo, la escucha activa es esencial para encontrar soluciones. Por ejemplo, dos colegas pueden tener diferencias en la forma de abordar un proyecto. En lugar de ignorar o minimizar el conflicto, un enfoque de escucha activa involucraría a ambas partes para expresar sus preocupaciones y perspectivas. Al escuchar con empatía, se pueden identificar las raíces del conflicto y trabajar juntos para encontrar un compromiso o una solución que satisfaga a ambas partes.
- Evaluaciones de desempeño y retroalimentación: Los gerentes pueden aplicar la escucha activa al llevar a cabo evaluaciones de desempeño o al proporcionar retroalimentación a los empleados. En lugar de simplemente dar retroalimentación unilateral, el gerente escucha primero al empleado para comprender su punto de vista sobre sus fortalezas y áreas de mejora. Luego, el gerente puede proporcionar comentarios específicos y constructivos, basados en esa comprensión. Esto no solo ayuda a los empleados a sentirse valorados, sino que también mejora la calidad de la retroalimentación y facilita un desarrollo más efectivo.