Entrevista con Ramón Heredia, Director Ejecutivo de Digital Bank Latam y profesor de UNIR.
Ramón Heredia Jerez es uno de los mayores expertos en innovación y tecnología financiera de América Latina.
Empresario y mentor de startups, en la actualidad es Director Ejecutivo de Digital Bank Latam, una de las plataformas de innovación financiera más importantes de la región.
Autor de los libros Ecosistemas digitales. La revolución de todas las industrias (2014) y La revolución digital y el futuro de los servicios financieros (2017), Ramón Heredia es parte del claustro del curso online de Experto Universitario en Banca Digital y Fintech de UNIR España.
En esta entrevista abordamos con él las oportunidades y los retos de la Fintech en Iberoamérica, un espacio prometedor para la industria.
Vive UNIR: ¿Cómo definiría la Fintech y cuáles son las características que más destacaría de ella?
Ramón Heredia: Una Fintech es una empresa de tecnología que entrega servicios financieros sin ser banco y sin tener las regulaciones y características de la industria financiera tradicional.
Su principal característica es que, gracias a no tener el peso histórico de las finanzas tradicionales, ha desarrollado servicios con nuevas tecnologías y metodologías centradas en el cliente y no en el proceso. Todo esto la hace mucho más ágil y liviana para la entrega de servicios.
Vive UNIR: ¿Cuáles son las aportaciones más importantes de la Fintech al sector bancario?
RH: A mi juicio, el principal aporte es centrarse en resolver las necesidades de las personas de una forma simple.
Al no tener el peso de los procesos y las regulaciones, está utilizando las nuevas tecnologías para crear nuevos modelos de negocio, permitiendo el acceso a los servicios financieros a muchas personas que no lo tenían y entregando nuevas formas a los usuarios tradicionales de la Banca.
Vive UNIR: ¿La Fintech llegó para sustituir al sector bancario o para estimular la innovación en el mismo?
RH: En el año 2012 y 2013, cuando creamos Digital Bank Latam, vimos una fuerte resistencia por parte de los bancos a la irrupción de las Fintech. Las veían como una amenaza. Pero con el tiempo y con una visión de colaboración, pudimos desarrollar un movimiento de cooperación entre ambos “bandos”.
La mayoría de las Fintech no tienen el tamaño, ni el respaldo financiero de los bancos tradicionales. Y los bancos, por otro lado, no tienen la agilidad y la libertad para probar todos los modelos de negocio que pueden probar las Fintech.
Vive UNIR: ¿Cuáles son los retos a los que deben enfrentarse el sector bancario y la Fintech en Iberoamérica?
RH: El principal reto para los bancos y las Fintech son las Bigtech. Gigantes como Facebook, Amazon, WeChat, por un lado, y los unicornios, como Rappi, Uber y Mercado Libre, están entrando con fuerza a entregar servicios financieros.
Mientras los bancos y las Fintech estaban distraídas discutiendo entre ellas, estos gigantes disruptores, que comenzaron conectando a las personas, a los que les regalamos nuestras almas y corazones en forma de datos, sin darnos cuenta y en forma invisible comenzaron a desarrollar servicios financieros, con miles de millones de dólares para seguir comprando almas y para seguir tomando el control de nuestros corazones.
El que tiene el corazón de las personas puede vender lo que quiera. Uber y Rappi se están convirtiendo rápidamente en el sistema operativo de la vida de las personas. Rappi recibió la inversión de mil millones de dólares de SoftBank de Japón, precisamente para seguir captando usuarios y para reforzar su billetera digital Rappi Pay.
Por lo tanto, el gran desafío para la industria financiera será estar en las plazas digitales de las personas, en sus ecosistemas. De nada sirve desarrollar la más linda app bancaria si el cliente está entretenido en su plaza digital y en esa misma plaza hace todas las compras, ahorros y transacciones que necesita.
Las personas no nos levantamos todos los días a hacer transacciones financieras, nos levantamos a vivir, y gran parte de nuestra vida la hacemos hoy en estas plazas digital y ecosistemas de nuestras vidas.
Vive UNIR: En relación con las oportunidades, ¿cuáles son las que ofrece la región iberoamericana a la Banca y a la Fintech?
RH: En Latinoamérica vemos una tremenda oportunidad para que la Banca, la Fintech y las startups trabajen juntas. El desafío para ambas industrias será desarrollar sus propios ecosistemas digitales y para hacerlo se necesitan más que nunca. Los bancos no tienen el foco y la capacidad para desarrollar tantas soluciones al tiempo. Y las Fintech y startups necesitan bancos que procesen transacciones con seguridad y bajo las regulaciones de cada país en Latinoamérica. El desafío acá es crear nuevos ingresos, no pelearse los que ya están.
Vive UNIR: En cuanto a la formación académica, ¿por qué considera importante especializarse en Banca Digital y Fintech con UNIR?
RH: He tenido el honor de participar desde el primer programa de Banca Digital y Fintech de UNIR y he sido testigo directo de la tremenda calidad de los profesores y el contenido. España es un país líder en el desarrollo de Banca Digital y Fintech, lo que, sumado a la experiencia de docentes internacionales, le da la mezcla perfecta para aprovechar las oportunidades que esta revolución digital nos trae.
La salsa secreta de este programa es la excelente selección de contenidos, los docentes de primer nivel y las clases con casos reales de lo que está ocurriendo en la región y el mundo.
Vive UNIR: ¿Cuáles son las oportunidades que adquiriría alguien que estudie Fintech residiendo en el espacio iberoamericano? ¿Qué capacidades prácticas puede adquirir y aplicar en la región?
RH: Como dijo una vez Bill Gates: “La Banca va a seguir existiendo; los bancos, no”. Una frase que a mi juicio es un poco apocalíptica, porque creo que los bancos siempre serán necesarios. Pero me sirve para graficar la gran oportunidad de los alumnos que tomen el curso, porque por un lado les dará herramientas para transformar los modelos de negocio y servicio dentro de sus bancos. Y, por otro, la oportunidad de conectar su conocimiento bancario a la creación de sus propias Fintech o startups.
Es un programa que nos da la oportunidad de transformarnos en emprendedores Fintech dentro de nuestras empresas tradicionales o fuera, creando nuestro propio camino.