Gabriel García-Prieto, director de Relaciones Institucionales de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) en México, participó recientemente del XIX Foro nacional e internacional de Educación en Salud del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
En este espacio, destacó ante un auditorio colmado que “nuestra institución apuesta por la máxima calidad de la educación en línea, como una premisa esencial”, que ya iguala a la impartida por las más reconocidas instituciones que brindan educación superior presencial.
A la cita, convocada por el organismo que integra la estructura del Gobierno de México, acudieron destacados representantes de la sociedad civil del país, los estamentos gubernamentales, distinguidos cargos educativos e invitados especiales vinculados al ámbito de la salud. En esta edición, el encuentro llevó el nombre de ‘Nuevos paradigmas en la enseñanza en las profesiones de la salud’.
El IMSS, a través de la Coordinación en Educación en Salud (CES) organizó esta iniciativa del 7 al 11 de octubre pasado en una de sus sedes principales de Ciudad de México. En el congreso participaron más de una veintena de destacados oradores, a través de disertaciones, paneles y mesas de debate.
Entre otras temáticas, se abordaron cuestiones como ‘reingeniería de la formación docente en salud: innovación, tecnología y andragogía’; ‘impacto en las redes sociales en la educación permanente de profesionales de la salud’, y ‘Calidad aplicada a la educación a distancia’.
Una educación en línea de máxima calidad: el modelo de UNIR en México
Sobre este tema habló precisamente Gabriel García-Prieto, el pasado 9 de octubre. En el comienzo de su exposición, partió de una pregunta para desarrollar posteriormente sus ideas: “¿Es posible tener una educación en línea realmente de calidad?” Después explicó los motivos por los cuales la respuesta -obviamente- era afirmativa.
Para explicarlo mejor, detalló primero algunos de los rasgos principales del grupo educativo PROEDUCA, al que pertenece UNIR en México: “Trabajo en UNIR, una universidad internacional que se dedica a ofrecer educación en línea desde hace 20 años. Hoy tiene más 100.000 alumnos de muchos países. Asimismo, venimos trabajando con el IMSS desde hace varias convocatorias”, dijo para empezar.
A continuación, se metió de lleno en el tema de la calidad: “Quiero hablaros de calidad, que para nosotros resulta fundamental e importante en todos nuestros procesos como universidad. Para impartir los programas con el elevado nivel de calidad que nos distinguen, lo más importante es que la experiencia del usuario (en este caso, de nuestros alumnos) sea de excelencia. Buscamos que la experiencia en UNIR en México transforme sus vidas”, aseveró.
Desde su óptica, “hay un antes y un después en materia de calidad de la educación en línea, que es la pandemia del COVID, en 2019. Eso cambió el paradigma. Desde allí comenzó un proceso de digitalización a nivel mundial en las universidades, que debieron escoger entre dos caminos: adaptar el modelo presencial que tenían a uno en línea, o acometer un planteamiento nuevo. Muchos centros no fueron capaces de hacer ese cambio sin una modificación de procedimientos. El desafío real fue diseñar un modelo pedagógico virtual para esas circunstancias”, manifestó.
Materiales, nivel de docentes, acompañamiento al estudiante y métodos de evaluación continua
En esa línea, agregó: “En la pandemia todo el mundo tuvo que dar un salto, que en muchos casos fue de emergencia. Pero eso al final no generaba una educación de calidad. Para que una educación en línea sea efectiva, deben aplicarse dos cosas fundamentales: un modelo de gestión académica y uno pedagógico específico para impartir educación en línea. La calidad de la educación en línea no es distinta a la presencial: la calidad en línea se distingue realmente por los materiales (educativos e interactivos, que adapten sus contenidos al entorno digital), por el nivel de los docentes, por el acompañamiento a los estudiantes (que es un elemento diferenciador) y por los métodos de evaluación continua”.
Después indicó que “el perfil de las personas que estudian aquí, en UNIR en México, es de estudiantes situados en la franja de edad de los 30 a los 50 años. Generalmente trabajan y muchos tienen familia. Por ello, necesitan flexibilidad en sus vidas para poder estudiar. Cada modelo tiene su perfil de alumnos. Un perfil de profesionales como el nuestro necesita un modelo flexible y muy sólido”, dijo.
La inteligencia artificial, clave en el modelo de educación superior en línea
En otro de los momentos de su exposición, el director de Relaciones Institucionales de UNIR en México se refirió a la inteligencia artificial “que ayuda mucho en nuestros procesos. El docente en línea cuenta con numerosas herramientas digitales, cuyo uso puede adaptar en función del área de conocimiento. Los docentes deben eliminar los prejuicios de la educación en línea, descubrir nuevas formas de enseñar, compartir experiencias en entornos formativos, y aprender a manejar nuevas herramientas. Tenemos los algoritmos que evalúan el comportamiento del alumno durante el primer mes, por ejemplo. Aplicaciones como ésta son importantes para que el estudiante pueda organizarse. El estudiante de UNIR en México debe ser autónomo, y descargar las clases cuando pueda”, expresó.
Por otra parte, destacó que la IA generativa ya está aportando muchos beneficios en UNIR en México: “Cuando llama un asesor a un alumno, esta herramienta puede indicarnos qué tono de voz emplea el asesor, si los argumentos que utiliza son adecuados o no, cómo acompaña el proceso de matriculación de un alumno, etc. Esto también aplica a los chatbots, y a los mentores y tutores de los alumnos, para que puedan realizar mejor el acompañamiento”.
Asimismo, dijo que la IA se está incorporando para organizar más eficazmente los materiales pedagógicos: “Los docentes tienen que actualizar permanentemente los contenidos. En UNIR en México tenemos más de 60 maestrías. El uso de los materiales en el proceso de aprendizaje, el seguimiento personalizado en todo el itinerario del
estudiante y el proceso de aprendizaje de los alumnos se optimizan con la ayuda de la IA, porque permite -entre otras ventajas- personalizar los procedimientos de aprendizaje. UNIR ha apostado definitivamente por la IA: tiene un departamento en marcha para mejorar la experiencia de los estudiantes, para que ésta sea la adecuada y óptima”.
Además, señaló que “para que cualquier propuesta educativa basada en la modalidad de educación a distancia sea efectiva, se necesita la interacción de un modelo de gestión específico de universidad en línea, y un modelo de gestión académica (ambos monitoreados por un departamento de gestión administrativa, y de otro académico). El personal de gestión administrativa es muy potente en la estructura de enseñanza online”.
La medición de la calidad, algo fundamental para UNIR en México
Finalmente, describió por qué “es importante un sistema de la medición de la calidad. Nosotros trabajamos con un índice de calidad, dividido en índice de satisfacción y de índice de finalización por parte de nuestros estudiantes. En nuestra institución se mide todo: los procesos, los programas, la calidad, la gestión administrativa… Y eso lo evalúan nuestros alumnos, que miden del 1 al 10 su experiencia. Esto nos ayuda a saber qué rumbo tomar. La satisfacción del alumno, su experiencia vital que le aporta un curso, eso es sinónimo de medición de la calidad. El promedio de índice de satisfacción medio es de 8,2 sobre 10 en nuestra universidad. El índice de finalización es de 82% de media sobre 100% en estudios de grado, y de un 89% sobre 100 en estudios de posgrado”, concluyó.