La prevención en salud es clave para prevenir la aparición de la enfermedad, reducir los factores de riesgo, detener su avance y atenuar sus consecuencias.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) definió en 1988 a la prevención en salud como aquellas “medidas destinadas no solamente a prevenir la aparición de la enfermedad, tales como la reducción de factores de riesgo, sino también a detener su avance y atenuar sus consecuencias una vez establecidas”.
De esta manera, la prevención en salud se entiende como aquellas medidas orientadas a prevenir y detener el avance de una enfermedad, así como a aliviar o atenuar sus efectos una vez iniciada. La prevención debe estar basada en el conocimiento de la historia natural de la enfermedad o en cómo evoluciona un proceso patológico cuando no hay intervención médica de por medio.
Tipos de prevención en salud
Hay que tener claro que cuanto antes se apliquen las medidas de intervención, mejor será el resultado en la prevención de la enfermedad o de sus secuelas. Con todo ello, al controlar un problema de salud, se pueden establecer principalmente tres tipos de prevención, que dependen del nivel en el que se encuentre la citada enfermedad: prevención primaria, prevención secundaria y prevención terciaria.
Prevención primaria
La prevención primaria agrupa a todas aquellas actividades sanitarias orientadas a la población general, con el objetivo de impedir el comienzo o adquisición de una dolencia o problema de salud, de disminuir la incidencia de la enfermedad, mediante el control de los factores causales y los predisponentes. Tiene lugar cuando aún no ha surgido la enfermedad, es decir, en personas sanas, y las medidas pueden estar dirigidas a prohibir o a disminuir la exposición de la persona a ese factor dañino para su salud.
Según la OMS, la educación para la salud es uno de los elementos clave en la prevención primaria en salud, ya que tiene por objetivo el fomento de actividades dirigidas hacia una mejora en la salud de la persona. Incluso no solo información sobre aquellas condiciones sociales, económicas o ambientales que pueden influir sobre la salud de la persona, sino también sobre aquellos factores de riesgo.
Un ejemplo muy gráfico de prevención primaria en salud es la campaña de vacunación contra la infección de COVID-19, cuyo objetivo es finalizar con la pandemia de coronavirus SARS-CoV-2 y evitar más muertes por esta enfermedad.
Otros ejemplos de prevención primaria en salud son las campañas de promoción de hábitos saludables para, por ejemplo, controlar y evitar los factores de riesgo cardiovascular, limitar el consumo de alcohol, no fumar, adoptar una dieta sana o la práctica de ejercicio físico, entre otros.
Prevención secundaria
La prevención secundaria en salud se orienta a detectar la posible enfermedad en sus estadios más iniciales y actuar lo antes posible para retrasar el progreso de la enfermedad.
Las medidas van encaminadas hacia la detección, diagnóstico y tratamiento precoz de la enfermedad. Un ejemplo: las campañas de cribado de cáncer de colon o de detección precoz del cáncer de mama.
Así, esta prevención en salud se orienta a mejorar la calidad de vida del paciente dentro del proceso patológico. Su objetivo también es marcar las líneas de actuación a seguir para intentar evitar su progreso y, en caso de que se desarrolle, lograr un buen tratamiento para afrontarla y así reducir al máximo sus posibles secuelas o complicaciones. No solo participan en este nivel los médicos de atención primaria, sino también los especialistas de área.
Prevención terciaria
Se encamina hacia el tratamiento de la enfermedad en sí, con el objetivo de reducir las complicaciones o secuelas y la rehabilitación una vez superada la enfermedad. Tiene como objetivo mejorar la calidad de vida del paciente, que se recupere de la enfermedad, su rehabilitación y acelerar su reincorporación a la vida normal. Siempre hay que evitar llegar a ella.
Aquí es vital el control y el seguimiento del paciente e intentar minimizar al máximo los sufrimientos causados al perder la salud. Como ejemplos estarían la rehabilitación tras un ictus o fisioterapia tras la retirada de un yeso.
Promoción en salud vs. prevención en salud
Aunque a veces se usan indistintamente, no es lo mismo la promoción en salud que la prevención en salud. La promoción en salud, o Health Promotion, es una estrategia establecida en la Carta de Ottawa de 1986, impulsada por la OMS, donde se entiende la promoción de la salud como: “el proceso que proporciona a los individuos y las comunidades los medios necesarios para ejercer un mayor control sobre su propia salud y así poder mejorarla”. De esta forma, fija la promoción en salud dentro de un proceso social y político global, con el objetivo de aminorar su impacto en la salud pública. La principal diferencia con la prevención en salud radica en que la promoción trabaja con población sana, mientras que la prevención con personas en riesgo de enfermar o bien enfermas.
En definitiva, la prevención en salud se basa en todas aquellas medidas que no solo están orientadas a prevenir una patología, sino también a reducir sus factores de riesgo o asociados, detener su avance y mitigar sus posibles consecuencias. Para poder realizar una adecuada prevención en salud es vital la formación del profesional sanitario en materia de seguridad del paciente para ello te recomendamos la Maestría en Administración en Salud o la Maestría en Dirección y Administración de Equipos de Salud de UNIR México.