La robótica educativa es el empleo de robots en el aula con el fin de que los alumnos aprendan jugando y adquieran conocimientos relacionados con las matemáticas, tecnologías, ciencias o ingeniería.
Los niños de la sociedad actual son nativos digitales y, por lo tanto, la educación debe adaptarse a esta circunstancia. Una forma de hacerlo es mediante la robótica, una materia interdisciplinar en la que se trabajan tanto conceptos matemáticos y científicos como la concentración y la creatividad. La robótica educativa consiste en emplear robots en el ámbito educativo con el fin de educar a los alumnos para que adquieran conocimientos en este ámbito, profundicen en su estudio y aprendan habilidades cognitivas.
¿Qué es la robótica educativa?
La robótica es un método interdisciplinario en el que se trabajan las áreas de Matemáticas, Tecnología, Ciencias e Ingeniería. Su carácter transversal posibilita que los niños también desarrollen el pensamiento lógico, la imaginación y la lingüística (incluidos términos en inglés).
Las clases de robótica pueden iniciarse ya con alumnos de Infantil. En esta etapa se utilizan herramientas como el Lego Education o Cubetto en los que prima la manipulación de materiales fomentando la creatividad y la percepción espacio-temporal. A medida que el niño crece y se familiarice con la dinámica de la robótica aumenta la dificultad de los retos planteados. Así, aprenderá a realizar circuitos eléctricos, maquetas en 3D, programar de forma sencilla con plataformas como Scratch o Code.org, y ya en Secundaria a realizar robots personalizados en cuanto a movimientos y acciones.
Una de las características de la robótica es que siempre se imparte a través de la gamificación, es decir, se aprende a través del juego. Esto posibilita asimilar conceptos matemáticos, físicos, mecánicos o informáticos de una forma divertida y, consecuentemente, mejorar en la adquisición de competencias que forman parte de los currículos escolares.
Principales tipos de robots educativos
Existen una gran variedad de robots educativos que ayudan a los estudiantes a iniciarse en la robótica y la programación de forma interactiva. Alguno de los más empleados son:
Makeblock mBot
Es un robot educativo ideal para niños, puesto que su control y uso es fácil. No precisa de conocimiento avanzado y su software open source (no necesitar licencia) lo convierte en la herramienta clave para organizaciones y centros educativos. No obstante, este robot también ofrece múltiples posibilidades para aquellos usuarios que quieran avanzar en este ámbito y aprender jugando.
Robo Wunderkind
Acerca la tecnología a los niños de forma activa y didáctica. Es un juego robótico que se compone de diferentes módulos cuya función está identificada con un color diferente. Estos cubos se pueden programar de forma sencilla para diseñar con ellos diferentes construcciones robóticas a través de una app de fácil utilización.
Bee-bot
Es un robot infantil muy útil y sencillo de programar para que los más pequeños aprendan jugando. Bee-bot acepta hasta un máximo de 40 instrucciones o comandos que se programan a través de unas teclas de dirección.
Mindstorms EV3 de Lego
Con esta herramienta se pueden crear diferentes robots, que tienen capacidad para moverse y realizar diferentes acciones. Se programa con una interfaz sencilla e intuitiva. Es un robot que está diseñado para ser usado por alumnos mayores de 10 años.
OWI 535
Es un brazo robótico que puede levantar objetos de hasta 100 gramos indicado para alumnos mayores de 13 años. A través de su programación pueden diseñarse una gran variedad de movimientos.
NAO
El robot educativo más popular que, gracias a sus diferentes niveles de programación, es apto para ser usado en clase de Infantil con niños de 5 años y alumnos de más edad, incluso universitarios. NAO es un robot humanoide de 58 centímetros de altura que realiza diferentes acciones: observa, mantiene diálogos y escucha de forma activa, siendo capaz de interactuar.
Beneficios de la robótica en niños
Los beneficios de la robótica no solo están en lo más evidente –aprender a programar y familiarizarse con la tecnología– sino que permite el desarrollo de otras habilidades y un aprendizaje transversal.
- Trabajo en equipo: muchos de los retos planteados deben resolverse trabajando en equipo. Esto contribuye a la socialización y a la colaboración ya que solo coordinándose y poniendo en común conocimientos/habilidades lograrán resolver los problemas.
- Liderazgo y confianza: a medida que se realizan pruebas más complejas crece la confianza en uno mismo y sus capacidades. Esta autoestima se complementa con la tolerancia a la frustración cuando no consiguen realizar lo que se les plantee a la primera.
- Fomento del emprendimiento: los niños desarrollan nuevas habilidades a base de experimentar y prueba/error. Por eso se despierta en ellos las ganas de innovar, de pensar autónomamente y, consecuentemente, de emprender sus propios proyectos.
- Pensamiento lógico: la robótica fomenta la lógica y el razonamiento por lo que, indirectamente, también es válida para trabajar el pensamiento filosófico.
- Psicomotricidad: el ensamblaje necesario para encajar las piezas de los proyectos/robots requiere de un trabajo de psicomotricidad y coordinación.
- Creatividad: la imaginación está siempre presente ya que los alumnos deben diseñar diferentes maquetas, robots, construcciones…
- Curiosidad: descubrir cómo se realiza una maqueta o cómo es posible que se mueva un robot despierta la curiosidad y el interés por aprender cosas nuevas. Frente al sistema tradicional de repetición es el propio niño el protagonista al tener que realizar su material utilizando sus propios recursos.
- Concentración: perfecto para los niños más inquietos y a los que les cuesta centrarse.
- Matemáticas: mejora en la resolución de problemas, operaciones matemáticas y razonamiento.
La robótica en colegios e institutos
La introducción de la robótica en el currículo escolar de colegios e institutos españoles es, de momento, anecdótica (algunos centros la imparten en los últimos cursos de Primaria). Su presencia en los centros escolares suele incorporarse en la oferta de extraescolares. Una de sus ventajas es que su contenido puede adaptarse tanto a estudiantes de Infantil como de Primaria, Secundaria, Bachillerato o Formación Profesional.
La innovación educativa que demanda la sociedad actual pasa necesariamente por la introducción paulatina de asignaturas relacionadas con las TICs en las que los alumnos dejen de ser meros espectadores de los profesores y puedan diseñar y construir sus propios proyectos. Con estos conocimientos, los estudiantes podrán incorporar unas capacidades muy valiosas para abrirse camino en profesiones que serán clave en un futuro.
Formación de los docentes para introducir la robótica en el aula
Para introducir la robótica en el aula es fundamental que los docentes cuenten con la formación adecuada. Al respecto, un docente debe contar con ciertas habilidades para impartir robótica a sus alumnos. Por ello, es recomendable que quien se especialice en este ámbito sea una persona:
- Hábil con los números.
- Con gusto por las matemáticas, la programación, la robótica y la ingeniería.
- Capacidad analítica.
- Esté al día de innovaciones tecnológicas.
- Buena comunicadora para explicar correctamente a los alumnos tanto términos complejos como procesos de programación de diversos tipos.
- Cuente con capacidad para el desarrollo del pensamiento lógico, clave en la enseñanza de la robótica.
Estas habilidades pueden ser complementadas por otras intrínsecas en el propio docente, tales como la habilidad para interaccionar con niños, el interés por la enseñanza y la comunicación ágil. Además, la formación continúa en este ámbito es de gran importancia para los maestros y profesores, ya que cuanto más y mejor formación tengan, más eficientes y mejores serán sus clases. Así, titulaciones como la Maestría en Tecnología Educativa y Competencias Digitales de UNIR México capacita al profesionista para especializarse en este área e inmiscuir a alumnos de cualquier edad en el mundo de la robótica, contribuyendo a mejorar su carrera profesionista en un futuro.