Funciones del trabajador social y requisitos necesarios

Un trabajador social es un profesional que promueve el cambio y el desarrollo social, la cohesión social y el fortalecimiento y la liberación de las personas, según la definición oficial aprobada por la Federación Internacional de Trabajadores Sociales. Aunque es habitual ubicar a estos profesionales en el ámbito del Sistema Público de Servicios Sociales, también es posible ejercer como trabajador social en una empresa, concretamente dentro del departamento de Recursos Humanos.

El trabajo social de empresa está definido como la “actividad organizada, que pretende ayudar a la adaptación recíproca de los trabajadores y su empresa”. Para lograr esto, el trabajador social se sirve de técnicas y métodos para detectar, analizar y resolver los problemas que puedan surgir en la adaptación y día a día del trabajador en una organización.

El trabajador social es una suerte de facilitador en las relaciones entre los trabajadores y la compañía y su trabajo está orientado a lograr la calidad de vida laboral, el compromiso y la retención de talento, aspectos que impactan de forma positiva en la productividad de la empresa.

Principales funciones del trabajador social en una empresa:

En general, la misión del trabajador social en la empresa será prevenir conflictos y contribuir a la mejora de las relaciones entre los colaboradores. Sus funciones pueden abarcar:

• Prevención

Trabajar en el campo de la prevención supone disminuir recursos en futuras intervenciones, puesto que así se evitan situaciones de exclusión. El profesional se centra en la detección precoz de las causas que generan problemáticas individuales y colectivas, derivadas de las relaciones humanas y del entorno social, y que pueden desencadenar una situación de vulnerabilidad.

• Atención directa

Una de las premisas básicas del trabajo social es el contacto directo con usuarios; el profesional debe atender a las personas o grupos que presenten indicios o estén en riesgo de exclusión social en ámbitos como centros penitenciarios, migrantes, menores, etc.

• Planificación

El objetivo es realizar un diagnóstico social que permita conocer la realidad social de una zona, usuario o colectivo para elaborar un proyecto con objetivos acorde a dicha situación. También tiene en cuenta la perspectiva desde otras disciplinas, ya que el trabajador social suele integrarse en equipos interdisciplinares.

• Promoción

El trabajador social se ocupa de potenciar las capacidades y la facultad de autodeterminación de usuarios y colectivos. Además, diseña e implementa las políticas sociales que favorecen la creación y el reajuste de servicios y recursos adecuados para la cobertura de necesidades sociales.

• Mediación

Se trata de una nueva área de trabajo de esta disciplina que surge como alternativa a procesos judiciales largos y costosos en ámbitos como el familiar. El profesional —desde su imparcialidad— posibilita la mediación entre las partes implicadas en el conflicto para que así sean ellas las que lleguen a un acuerdo.

• Evaluación

Es uno de los pasos más importantes dentro de la intervención. En base a los objetivos propuestos, teniendo en cuenta técnicas, recursos y el tiempo empleado, se detectan errores y se proponen nuevos objetivos y metodologías para alcanzarlos.

• Gerencia

El profesional del trabajo social se encarga de dirigir, organizar y planificar los programas sociales.

En las últimas décadas, la figura del trabajador social en la empresa ha evolucionado y recuperado protagonismo debido, sobre todo, a una forma distinta de entender el liderazgo y la gestión del talento. El sector privado, consciente de que compone un sistema propio y complejo, se esfuerza por integrar en su tejido a profesionales con herramientas y técnicas que garantizan que todos los elementos puedan integrarse y desempeñar sus labores en un entorno de bienestar, productividad y con miras hacia el desarrollo profesional.

¿Cuánto gana un trabajador social en una empresa?

El salario de los trabajadores sociales en el ámbito privado está sujeto a varios factores, según datos de Jobted, en términos generales, el salario mensual de un trabajador social es de $8,276 al mes.

Formación para ser trabajador social

La Licenciatura en Recursos Humanos de UNIR México está diseñada para formar profesionistas expertos capaces de aportar a las compañías una visión estratégica y práctica. Posterior a este estudio, la Maestría en Intervención Social te brindará una visión estratégica y práctica, que te permitirá liderar equipos y departamentos impulsando mejoras constantes. Especialízate en ámbitos de intervención como la mediación en el ámbito de la empresa y la gestión de personas. Además, es un itinerario idóneo para aquellos profesionales del trabajo social que deseen reorientar su trayectoria hacia el ámbito privado.

¿Dónde puede laborar un trabajador social?

En general, este profesional puede trabajar:

• En el ámbito público, en los diferentes sistemas públicos de protección social de la Administración estatal y ligado a las áreas de educación, sanidad, empleo, servicios sociales, dependencias, etc.
• En el ámbito privado, por cuenta ajena como trabajador social en una empresa o como profesional autónomo.
• En el tercer sector u organizaciones no gubernamentales, sin ánimo de lucro, civiles, fundaciones, cooperativas u otros tipos de organizaciones sociales.

En cualquier caso, el trabajador social cumple el rol de atender las necesidades, carencias, dificultades o problemáticas específicas que puedan surgir a un ciudadano en cualquier etapa de su vida: desde el cuidado de niños y jóvenes en situaciones vulnerables, hasta el seguimiento de personas involucradas en procesos judiciales, víctimas de desigualdad, de violencia de género, en situación de dependencia, migrantes y refugiados, entre otros. Su trabajo se rige por los principios de la justicia social, los derechos humanos, la responsabilidad colectiva y el respeto a la diversidad.

Competencias del trabajador social

Según el Libro blanco del Trabajo Social, en el apartado denominado “competencias específicas de formación disciplinar y profesional del trabajo social”, se establecen aquellas que diferencian a esta profesión de otras disciplinas. Las competencias del trabajador social se dividen en seis grupos.

• Capacidad para trabajar y valorar de manera conjunta las necesidades y circunstancias de las personas que son objeto de atención.
• Capacidad para planificar, implementar, revisar y evaluar la intervención que se lleva a cabo con los usuarios, así como con otras organizaciones, comunidades y con otros profesionales de diferentes disciplinas.
• Capacidad para apoyar a las personas para que trabajen en su promoción, y así expresar sus necesidades.
• Capacidad para actuar en aquellas situaciones vulnerables de colectivos en riesgo.
• Capacidad para administrar y ser responsable respecto a los valores de la disciplina de la profesión.
• Capacidad para demostrar competencia profesional en el ejercicio del trabajo social.

Es importante que este perfil profesional cumpla con el compromiso ético, el respeto a la autodeterminación, el reconocimiento a la diversidad y multiculturalidad, así como aquellas premisas establecidas en el Código Deontológico del Trabajo Social.

Habilidades del trabajador social

Para poder llevar a cabo todas sus funciones y competencias es necesario que los profesionales del trabajo social cuenten con las siguientes aptitudes:

• Contar con habilidades comunicativas, tanto oral como escrita, para llegar a todas las personas y colectivos.
• Realizar diagnósticos sociales con tal de diseñar y ejecutar proyectos de intervención.
• Diseñar e implementar políticas sociales que corrijan las desigualdades.
• Fomentar la participación social.
• Trabajar en equipos interdisciplinares.
• Mantener en todo el proceso de intervención la escucha activa con los usuarios y el respeto a la diversidad y multiculturalidad para ejercer una intervención sin sesgos.
• Velar por la dignidad de los usuarios y colectivos objeto de atención y su derecho a la autodeterminación.
• Ofrecer buen trato, atención y respeto a todas las personas atendidas.

El trabajo social es una disciplina fundamental para la inclusión de los colectivos más desfavorecidos y personas vulnerables y que, por lo tanto, contribuye a crear sociedades más justas e igualitarias.